Tercer Secreto: El Poder de la Solidez de PropĂłsito
¿Crees que con el doble de tu salario actual podrĂas comprar
la casa que anhelas?
Muchas personas dicen que desean tener dinero pero muy pocas
se toman el tiempo necesario para considerar lo que realmente quieren o por qué
lo quieren. Si quieres comenzar a producir riqueza abundante en tu vida tendrás
que pensar en estas cosas con detenimiento.
Es absolutamente esencial averiguar
lo que realmente quieres o deseas hasta el Ăşltimo detalle.
Debes de tener metas concretas, no basta con decir “me
gustarĂa ser rico”. Para construir un futuro, debes centrarte en lo que te
gustarĂa tener y el tiempo que consideras necesario para lograrlo.
En realidad, la vida es como un viaje, si sabes a donde te
diriges es mucho más probable que llegues ahĂ. Digamos que tienes una serie de
lugares que te gustarĂa visitar. ¿CĂłmo te aseguras de que terminarás
visitándolos todos? Escribiéndolos.
Lo mismo pasa con las metas; para que sean
más eficaces deben escribirse y debemos volver a ellas de forma regular para comprobar
que mantenemos el rumbo correcto. Hay que revisarlas cada dĂa, de preferencia tres
veces, para que estén presentes en tu mente. De esta forma, todo lo que decidas
hacer estará determinado por tus metas.
Ahora bien, para sacarle mayor partido a tus metas debes
formularlas de una manera que activen tu mente inconsciente. Desecha las frases
que empiezan con “me gustarĂa”, “espero” o “intentarĂ©”; en vez de eso exprĂ©sate
de la siguiente manera:
“Entre ahora y el final de año, estoy ganando 40 mil pesos
mensuales”.
Recuerda siempre escribir tus objetivos en la forma de
afirmaciones positivas, expresadas en el tiempo presente. Si escribes tus
objetivos de esta manera, estarás a medio camino de lograrlos. Hay algo casi
mágico en este proceso, ya que atraes esas metas a tu vida. El mero hecho de
escribirlas y leerlas 3 veces al dĂa (mañana, tarde y noche) inicia el proceso
de adquisiciĂłn.
La VisualizaciĂłn Creativa
Sea cuales sean tus metas, imagĂnate que ya las has logrado.
Si una de tus metas es vivir en una casa determinada, imagĂnate de forma vĂvida
disfrutando esa casa; o si tu meta es lograr un trabajo en particular visualĂzate
haciendo ese trabajo. Si lo deseas, no es un sueño.
Cuando imaginas que ya has logrado tu meta, esta se vuelve más
real, más probable. Es una técnica que emplean los grandes atletas porque les
infunde un sentido de confianza en sĂ mismos, una sensaciĂłn de certidumbre de
que pueden y van a lograr sus objetivos.
Identifica las
razones de tus metas
Por Ăşltimo, ten presente que las razones les dan a las metas
su propĂłsito.
Por ejemplo, querer
ganar una determinada suma de dinero no es tan poderoso como ganar una cierta
suma de ingresos para poder comprar una casa, ir de vacaciones a donde siempre
has querido o poder mandar a tus hijos a una universidad concreta. Sea lo que
sea, necesitas un propĂłsito.
La riqueza no radica en la acumulaciĂłn de dinero o
posesiones o en sĂ, sino en el poder que eso te aporta a la hora de cumplir tu
propósito en la vida. Identificar las razones que descansan detrás de tus metas
te proporciona el poder imparable de la solidez de propĂłsito.
Fragmento del libro "Los 10 Secretos de la Riqueza Abundante" de Adam J. Jackson